El viaducto posee 60 metros de altura, y longitud de 432 metros, por donde actualmente circula la carretera N-232. Se destaca en la estructura el vano principal sobre el barranco, con una luz de 102 m que se salva mediante un doble arco metálico apuntado.
El proyecto, diseñado por el estudio de ingeniería MC2, enfatiza la sinergia que existe entre la estructura del arco metálico, producido por Industrias Metálicas Anro, y el tablero del viaducto, integrándose por completo y dando como resultado esta fascinante estructura. La circulación fue abierta a finales de julio de 2022, permitiendo la dinamización social y económica de la provincia de Castellón facilitando la movilidad en la zona.